Sin lugar a dudas el lavadero de Fuentecantos es uno de los más bonitos de toda la provincia. No es un edificio cerrado pero si bien protegido tanto por su instalación, en un rincón, como por los muros que lo sostienen. Junto a él mana una fuente de abundante agua, revestida de buenos sillares hace más de ciento ciento cincuenta años, que nutre al lavadero sin cesar. El espacio donde se encuentra es hermoso, presidido por dos magníficos ejemplares de sauces blancos y rodeado de varios parterres con flores de dragonaria, rosa china o de Castilla y claveles moros, entre otros. La figura de una lavandera arrodillada engaña a los ojos desde lejos.
Recientemente, la artista Julita Romera -Alpargata- y la escritora Lucía Santamaría han dejado su impronta con actividades y dibujos y en un rincón han instalado un pequeño armario abierto, repleto de libros, para poder llevarlos y posteriormente devolverlos.
