Huellas de Soria

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La Trashumancia, otra vez

Foto de SoriaNoticias.com

Hasta mayo los madrileños tendrán ocasión de ver objetos relacionados con el pastoreo en la Real Fábrica de Tapices. Si para aquellos que no saben nada, o casi nada, del mundo de la Trashumancia, esta exposición logra despertar su interés, han de saber, además de lo que oficialmente ha supuesto esta actividad en España, durante siglos, que en un hermoso rincón de la provincia de Soria, en Tierras Altas, llamado Oncala, sus gentes llevan muchos años luchando para que el recuerdo no se pierda. No sólo en Oncala, en la mayoría de pueblos que componen esa histórica comarca, como por ejemplo Los Campos, en el municipio de Las Aldehuelas, y en otros de Burgos que limitan con ella, durante años están llevando a cabo, con gran esfuerzo, actividades relacionadas con el mundo pastoril.

Nos referimos aquí a Oncala, especialmente, por la Asociación El Redil y los tapices que cuelgan de las paredes de la iglesia de San Millán. Fidel Fernández de Pablo es el responsable de la Asociación El Redil que gestiona el Museo Pastoril de Oncala, ubicado en la antigua casa de la maestra, ejemplo didáctico, etnográfico e histórico de toda la provincia de Soria. Hace años que funciona pero nunca me canso de verlo y comprobar lo bien que lo conservan. Tampoco nos cansamos de escribir sobre una actividad que seguimos y admiramos sin cesar. Especialmente la actividad que en años alternos celebran Oncala y Los Campos y que recrea la llegada de los rebaños, el conteo, el esquileo y todas las actividades que se generan alrededor de la noble Trashumancia.

Hasta el mes de mayo los madrileños y todo aquel que pase por Madrid, tienen la posibilidad de conocer un poco esa actividad. Al acto de presentación acudió, además de Fidel Fernández, responsable de El Redil, el alcalde de Oncala, Martín Las Heras. La Real Fábrica de Tapices no es un recinto escogido al azar. En la Iglesia de San Millán, de Oncala, cuelgan diez tapices flamencos, ocho de los cuales fueron tejidos sobre cartones de Rubens. El conjunto fue declarado en 1983 Bien de Interés Cultural.